sábado, 29 de septiembre de 2012

La colombiana


En el piso de arriba
Vive una colombiana
Sin querer toca el sexto
En el ascensor
Y pone sus llaves
En mi puerta
y yo que cierro mal
Hace dos viernes
Se metió adentro
Me quedé quieto
y a ella se le cayeron las bolsas del supermercado
del susto
Fui amable
Pero el viernes pasado otra vez se equivocó
A las 2 AM
Y ya me fastidié
(Aunque sea hermosa)
El viernes que viene
La esperaré
Con unos negros fumadores de crack
Y látigos
Así la imagen fugaz
le queda grabada
Como regla mnemotécnica
Para que no se meta en mi casita
en mi vida
ni en mis cosas
Que aprenda de una vez
a apoyar la yema
De su dedo delicado
En el botón del séptimo
No en el sexto.

7 comentarios:

BLAS dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Una dijo...

Marcelo, qué tonto. Deja que se equivoque y se meta por error en tu cama.

Unknown dijo...

Quizás le guste la idea de los negros fumadores de crack con látigos...
Es tan amplia la mente de hombre...
Que de supuestos, creo yo, debemos tener, que no hay supuestos.
Abrazo!!!

SIL dijo...

Como ya he dicho antes, si la colombiana es hermosa,
el misántropo vecino se convertirá en breve, en un cachorrito dócil y sumiso :)



Un beso, Marcelo.


SIL

Maga h dijo...

jajaj...



Qué ternura me da ese nombre...tal vez sí o tal vez no, no sepa que si la espera con un moreno y látigo, ella ya no quiera salir del sexto, ni el que salga.

Me encantò.

h.j.s. dijo...

Jajaja.¡Qué bien!
Interesante, tomas de tu tiempo y le dedicas, aunque sea para asustarla.
¿Será de la CÏA; el FBI; del inconsciente?
En definitiva quiero saber lo que sigue

Reina dijo...

Pero... ¿su llave abre tu puerta...?
¡Qué peligro...!

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